Opinión
El compromiso de las universidades con la formación profesional

(Por Ing. Dr. Marcelo Vera Bacarreza, director de la iniciativa ACE – Advanced Continuing Education del Consorcio Iberoamericano para la Educación en Ciencia y Tecnología - ISTEC) El desafío que hoy tienen por delante las universidades y las empresas es reducir la brecha que existe entre las exigencias que plantea la matriz productiva y el nivel de competencias de los profesionales. Se trata de un desafío que puede escucharse con fuerza en diversos ámbitos a nivel regional.

 

En numerosos países se evidencia actualmente este gap, reflejado en la falta de preparación adecuada o en la escasez de talento disponible en términos de ingenierías y perfiles técnicos, lo cual obliga a reforzar y potenciar la educación STEM, en Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas.

 

A esto se suma la necesidad de reconvertirse profesionalmente en forma permanente, que impone la Cuarta Revolución Industrial frente a la desaparición de determinados trabajos y el surgimiento de nuevas ocupaciones.

 

Lógicamente este tipo de desafíos no tienen una resolución a corto plazo, ya que como señalan numerosos expertos, las decisiones que se tomen en educación tardarán al menos 10 años en verse plasmadas en una realidad de mercado.

 

Pero si no asumimos de inmediato la problemática, el deterioro en la calidad de nuestros graduados o en la falta de profesionales STEM, tendrá un impacto directo en el ámbito laboral a corto plazo.

 

Afortunadamente, ya son muchas las universidades latinoamericanas que están transitando este camino, impulsando las carreras técnicas en toda la región y desarrollando proyectos de investigación de impacto regional.

 

También es central, como señala el consultor de negocios Walter Brizuela, capacitar a las personas durante la etapa escolar para que aprendan a ofrecer sus servicios o a generar, a partir de ellos, su propio negocio, fomentar la creatividad, las habilidades de comunicación, la empatía y la cooperación, y ayudar a cada alumno a descubrir cuáles son sus capacidades innatas y las que genera a través de la educación, y mostrarles cómo pueden aplicarse a partir de la inspiración.

 

De esta manera, cuando llegan a la universidad pueden potenciar en mayor medida las competencias que adquieren, para aplicarlas luego a la vida laboral.

 

Finalmente señalar que desde ISTEC, como institución sin ánimos de lucro con presencia en toda América Latina, Estados Unidos y la península Ibérica, impulsamos proyectos para unir a las universidades y las empresas en pos de lograr mejores profesionales y un mayor desarrollo regional.