Análisis |
¿Cómo impacta el e-learning en la educación superior? |
(@americalearning #elearning #learning) Consultamos a siete rectores y vicerrectores de universidades latinoamericanas, junto a las representantes de una organización que tiene como miembros a más de 70 universidades de América y España, en relación a la creciente importancia que está teniendo la educación online en el ámbito universitario.
En este primer envío, ofrecemos opiniones desde Uruguay, Guatemala, Colombia, Venezuela, México, Perú y Estados Unidos. En el marco de las próximas ediciones, estaremos plasmando la opinión de otros rectores de países de América Latina.
No es, sin embargo, una modalidad nueva, sino que la educación presencial, gracias a las nuevas tecnologías permite alcanzar aprendizajes mucho más significativos, dados por una mayor retención, mejor apoyo a los estudiantes y mayor diversidad de recursos de aprendizaje. Todas las universidades están frente al desafío de como incorporar las nuevas tecnologías en su gestión y en la enseñanza, en tanto hoy crecientemente hay una relación directa entre la calidad y la virtualización, que requieren nuevas políticas públicas y nuevas visiones sobre la enseñanza. En Uruguay, la educación a distancia a nivel universitario aún no está reglamentada por lo que su utilización está muy limitada. Estamos trabajando con el Ministerio de Educación para lograr una normativa que permita la expansión de esta forma de educación tan importante.
Esto representa un gran reto para las generaciones anteriores y un cambio en el rol del docente, ya que debe de adaptarse a las nuevas exigencias de los estudiantes. Hoy el estudiante tiene acceso a diferentes presentaciones del tema, puede comparar conceptos, logrando así un aprendizaje significativo. La educación virtual permite al joven preparase de una mejor forma para competir en el siglo XXI. Los jóvenes tienen en sus manos estar mejor formados y mejor preparados. Actualmente, estas modalidades de aprendizaje están mezcladas, y el tener acceso a la educación virtual, permite inscribirse a cursos en otros lados del mundo y así comparar con la educación presencial local. El estudiante puede ingresar a clases con conocimiento del tema y algunos hasta preparados sobre el tema.
En este mismo sentido, la educación online, como instrumento y no como fin, representa un reto fundamental para las universidades que deben además debatirse en modelos educativos y financieros cada vez más urgidos de innovación. Uno de estos retos es evitar que la Universidad pierda su carácter de universalidad y de paso a un tipo de híbrido socio-cultural en el cual conviven un modelo presencial, asequible solo por una élite que puede pagar su alto costo, y un modelo a distancia dirigido al resto de la población, reforzando los círculos de pobreza. De allí el sentido de dar vida a un concepto de formación a distancia y no solo de educación on-line.
Considero que no es una cuestión discutible, sino algo que ha venido para quedarse, y que lo único que nos toca es encontrar los caminos para mejorarla y hacerla cada día más eficaz. Nuestro desafío tiene dos frentes de batalla: terminar de lograr el cambio cultural que exige, y concluir el desarrollo tecnológico que requiere. Ambas cosas están a medio camino, y eso es lo que limita a la educación en línea en el momento actual. Sin embargo, se trata de una andadura irreversible
Creo que aún el impacto que tiene la educación virtual sobre la educación superior es muy pequeño y que las universidades no han asimilado el alcance de los efectos que tendrá sobre ella la educación online y muy particularmente los MOOC's (Massive Open Online Course) o cursos abiertos y masivos en línea, que reclutan cientos de miles de participantes de todo el mundo de manera abierta y gratuita. De modo que es muy fácil, con iniciativas como Coursera y Udacity, tener a los mejores profesores del mundo, dictando los mejores cursos para cientos de miles de personas, completamente gratis. Ya hay universidades que adoptan estos cursos como parte de sus cursos acreditados por la institución. Si bien es cierto que buena parte de lo que se aprende en la universidad no sale de las aulas de clase sino más bien de la socialización, también es cierto que la educación en línea pone al conocimiento a la distancia de un teclado de computador. Sobre el rol de la universidad en este contexto, como siempre, el de resolver los problemas que están asociados a la educación en línea y sobre todo, a los de los cursos masivos y que tienen que ver con la rigurosidad de los cursos en línea, su evaluación, su acreditación, el estudio de las nuevas formas de aprendizaje (conectada, social, ubicua, personal) y la producción de materiales educativos atractivos y de calidad. En resumen, el de crear nuevas tecnologías que hagan que la educación en línea sea rigurosa, evaluable, amena, atractiva, formativa y que despierte la necesidad de querer aprender más. Sobre los desafíos que deben asumir las universidades frente al e-learning, a la luz de las nuevas realidades que impone la educación en línea y las tecnologías emergentes para el aprendizaje, es: "Adapt or Perish" (adaptarse o perecer), surgirán nuevas y numerosas formas de competencia, por ejemplo las de las grandes editoras de libros (como Pearson) y la de las empresas de renombre (IBM, Microsoft, Andersen Consulting, etc.), que ahora evolucionan hacia la formación en línea, o las empresas que salen de las universidades con el propósito de ofrecer educación universitaria masiva y de bajo costo (Coursera, Udacity, P2P, Venture Lab, EdX, Desire2Learn, Instructure, ...), que pueden atraer a un gran número de estudiantes no ya interesados en un diploma universitario sino más bien en un reconocimiento de una empresa de prestigio y además mucho más motivados por una formación específica del interés del propio estudiante (un programa más flexible armado sobre los intereses de cada persona). También es un desafío adaptar esas nuevas tecnologías para ampliar la matricula sin incrementar sensiblemente los costos o hasta disminuirlos al hacer economías de escala. Siempre hará falta la universidad y su rol de generadora y transmisora de conocimiento, pero ese rol se verá sensiblemente disminuido al frente de un salón de clases. Aquellas que no asimilen ese cambio podrían quedar como las tiendas de rentas de películas o como los fabricantes de CD's.
Este tipo de enseñanza puede formar parte de la educación en el sistema presencial, semipresencial o a distancia, siempre que el proceso de enseñanza/aprendizaje entre los docentes y discentes se realice a través de las TIC, pero con una buena calidad de enseñanza. En el sector universitario es algo nuevo en nuestro medio recién está ingresando, considero que para la enseñanza de carreras apropiadas para este tipo de enseñanza especialmente de letras puede ser factible, me preocupa si se quiere abarcar para la parte de ingeniería u otras carreras que se tenga que considerar prácticas de laboratorio para un mejor conocimiento, pienso que se tendría que considerar una enseñanza semipresencial. De lo indicado podría decir que es un gran reto para las universidades de poder implementar este tipo de enseñanza on-line a través de las TIC, pero creo que es necesario para poder abarcar una mayor extensión en la enseñanza educativa.
Luego del arribo de las TICs, en diferente ritmo y composición, todas las instituciones de educación superior las implementaron de alguna manera. En un principio, en la década de los´90, se las asumió como un modo de innovación y mejora de la docencia. Así fue como se generalizó la virtualidad, particularmente en las carreras presenciales. Hoy podemos afirmar que es innegable el impacto de la modalidad online en todo el ámbito de los procesos de enseñanza-aprendizaje. En adelante, las universidades y los sistemas de evaluación y acreditación deberán trabajar fuertemente para legitimar los procesos que se involucran en la modalidad online, de modo que colaborar en la construcción de su reputación. En este sentido, corresponde a las universidades comprender que esta modalidad de estudio puede beneficiar y ampliar las experiencias educativas de educadores y alumnos porque contribuye a extender el acceso y se constituye, por eso, en una efectiva alternativa para posibilitar el aprendizaje a lo largo de la vida, mediante un sistema más inclusivo.
Fecha de publicación 3 de julio 2013
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