AMERiCA LEARNiNG MEDiA

(Por Eduardo Martínez - consultor en Tecnología Educativa de Capacimac) Sin duda ésta es una época de aprendizaje para todos; esta etapa de nuestras vidas hará que reevaluemos muchas cosas desde el ámbito personal y laboral, así como las formas de comportamiento que desarrollaremos como sociedad, una vez terminado este suceso.

En muchas instituciones educativas privadas, desde educación básica hasta universidad, se ha implementado el trabajo a distancia para que los estudiantes no pierdan el ritmo con sus estudios; así mismo, los centros de capacitación que ofrecen sólo servicios de instrucción presencial, seguramente han tomado las medidas necesarias para adecuar sus procesos de instrucción hacia el ámbito online, máxime que la actividad económica se ha frenado.

¿Qué obstáculos enfrentan los formadores que nunca han impartido instrucción a través de esta modalidad?

• Pánico total: surge por el desconocimiento de estrategias para desarrollar un curso en línea. Muchos instructores se han mostrado renuentes a utilizar estas herramientas. Ahora que estamos en contingencia, se abre una gran oportunidad para emplearlas en beneficio de nuestra formación.

• Miedo a hacer el ridículo: Todos los que hemos impartido capacitación presencial por primera vez, cometimos muchos errores como el hablar en voz baja, meternos las manos a los bolsillos, llenar las diapositivas de mucho texto, no interactuar con el aula, etc, etc.  Si vamos a enfrentarnos al reto de hacer un curso en línea por primera vez, seguramente vamos a errar, no importa si hemos tomado capacitación para prepararnos en el tema.

Después de dos meses de estar en confinamiento, seguramente se han recabado muchas experiencias al usar la tecnología y combinarla con los procesos de educativos o de capacitación. Sin embargo hay que revisar si la forma en que se han desarrollado estas acciones es la correcta, por lo que a continuación se sugieren algunos consejos prácticos.

Recomendaciones:

Definir si la plataforma síncrona es la mejor opción para dar tus cursos.

Impartir un curso online no necesariamente implica que deba efectuarse de manera síncrona; es decir, realizar sesiones en tiempo real. La comunicación asíncrona también es una alternativa, no obstante, hay que determinar si el público al que va dirigida la capacitación, cuenta con el tiempo y la disciplina para realizar estos procesos de instrucción en forma autónoma.

Las sesiones síncronas son útiles cuando se requiere abordar planteamientos que requieren explicación específica y que sólo puede resolverse a través de la interacción entre el tutor y la audiencia. Si se planea dar una sesión teórica, basta con subir la información a través de cualquier formato (presentación en powerpoint, pdf, ligas a información o videos, etc) y mantener el canal del correo electrónico para resolver dudas.

Si se requiere realizar alguna demostración con un software, se puede hacer un video y posteriormente subirlo a un canal privado; de esta manera no se experimentará temor al equivocarse.

Desarrollar sesiones en línea con periodos de duración de más de dos horas, además de que va en detrimento del tiempo la atención del participante, seguramente esto conllevará a que desarrollar el “presencialismo virtual”, es decir, estar presentes sin realmente estarlo.

Consideraciones para realizar sesiones síncronas.

Las sesiones en tiempo real deben fundamentarse en un objetivo específico. Se sugiere que su duración esté determinada a 45 minutos de exposición y 10 de preguntas. Sin embargo, ante la contingencia por el COVID 19, y tratándose de un caso excepcional, se puede extender como máximo a 1:30 min., debido a que los niveles de atención de los participantes jóvenes han disminuido considerablemente durante los últimos años por diversos motivos, entre ellos, el uso excesivo de dispositivos móviles, los cuáles dañan el lóbulo frontal del cerebro, quién es el que rige los procesos de concentración y atención.

Una sesión en línea no debe ser estructurada como un monólogo, donde el instructor hable de un tema sin contar con la participación del participante.  El dinamismo y la agilidad son ingredientes importantes para mantener cautiva a la audiencia.

Formas de trabajar asincrónicamente.

Si consideras que lo tuyo no es salir en pantalla o escuchar tu voz en pantalla, puedes generar otras estrategias para trabajar con tus participantes desde casa.

Hay plataformas como Google Clasrroom o la misma plataforma de Microsoft Teams para llevar a cabo sesiones asíncronas de aprendizaje. Trabajar asincrónicamente significa que puedes utilizar el correo electrónico, los foros de discusión, así como la modalidad de pantalla compartida, en donde el participante puede mostrar avances respecto a un proyecto o una tarea.

En caso de optar por una plataforma gratuita, recomiendo Moodle, pero si no se ex experto en montar esta plataforma en un servidor alquilado, se puede utilizar Gnomio como una forma de usar Moodle en un servidor remoto, sin que se tenga que pagar el hosting.

Cronograma de actividades.

Se piensa que el desarrollar cursos en línea será mucho más, sin embargo, implica una serie de factores a considerar que demandarán mucho trabajo; uno de ellos es el hacer un cronograma de actividades para que los participantes sepan específicamente qué temas revisarán en cada sesión y cuáles son las tareas a entregar.

En un programa de instrucción en línea, es importante ofrecer certidumbre, por ello te aconsejo establecer una planeación y compartirla. Si no puedes calendarizar todas las sesiones, entonces comparte semana a semana avances del cronograma.

Comunicación a través de correo electrónico.

Los participantes inundarán de correos electrónicos la bandeja si no se establece con claridad los lineamientos, las actividades, las tareas, los mecanismos de evaluación, y en sí todo tipo de información referente al curso.

Los comunicados enviados por correo electrónico, incluso los documentos que se anexen a cada misiva, deberán ser realizados con excelente redacción y claridad para aminorar en lo posible los problemas de comprensión.

Así mismo, es importante determinar un horario para dar respuesta a los correos electrónicos. Se sugiere fijar un horario de respuesta cada día.

Consejos finales.

• No hay que tener miedo a usar este tipo de herramientas, finalmente la tendencia en la educación y la capacitación está migrando a desarrollar procesos de aula invertida, donde los estudiantes puedan capacitarse cada vez más en plataformas en línea y utilizar los espacios del aula para trabajar colaborativamente resolviendo estudios de caso o para realizar proyectos.

• Todo trabajo en línea requiere de constancia y dedicación. No basta sólo tomar cursos, hay que exponerse a la práctica constante de esta modalidad para asumir poco a poco el control que implica implementar y llevar a cabo un curso en línea.

• El correo electrónico es una excelente herramienta para comunicarse. Hay que hacerlo con efectividad, para ello, recomiendo redactar comunicados en un procesador de palabras y si no se cuenta con la habilidad para redactar bien, sugiero que colegas hagan lectura de los textos para saber si lo que se desea expresar, está contenido correctamente en el texto.

• Finalmente, deseo mucha suerte a todos los que emprendan por primera vez