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Automatización e Inteligencia Artificial: los riesgos de mantener un sistema educativo de otra época

La creciente automatización de los ámbitos laborales y la importancia de la educación, como factor determinante para poder adaptarse a un futuro incierto que comienza a tomar forma, es el contexto en el cual se presentó el Global Talent Competitiveness Index (GTCI). Sus resultados manifiestan la necesidad de reforma urgente del sistema educativo, que permitan proporcionar las habilidades técnicas y personales adecuadas, y la capacidad de adaptarse al cambio.

 

El informe anual de evaluación comparativa que mide la capacidad de los países para competir por el talento, fue desarrollado por la Escuela de Negocios INSEAD, en partnership con el Grupo Adecco y el Human Capital Leadership Institute (HCLI) de Singapur, bajo el tema: ‘Talento y Tecnología: Forjando el Futuro del Trabajo’.

 

Veamos algunas declaraciones efectuadas por los expertos involucrados en el proyecto, en las que permiten comprender los desafíos actuales y futuros para el ámbito laboral.

 

"La tecnología está cambiando las maneras de vivir y trabajar, aunque no siempre de manera espectacular: la aparición de un Internet omnipresente, de los objetos conectados (por ejemplo, automóviles auto dirigidos) y de los equipos virtuales que trabajan desde lugares remotos, han sido progresivos y casi ‘invisibles’. Esta es una de las razones por las que están afectando tan profundamente el mundo del trabajo. Sin embargo, parafraseando a Mark Twain, ‘las noticias sobre la muerte del trabajo han sido en gran medida exageradas’: la preparación para el talento y la competitividad del talento determinarán en gran medida qué economías liderarán la carrera para convertir los avances tecnológicos en creación de empleo", señaló Bruno Lanvin, director ejecutivo de Índices Mundiales de INSEAD y coeditor del Índice de Competitividad del Talento Global 2017.

 

Por su parte, Paul Evans, profesor emérito de recursos humanos y desarrollo organizacional de INSEAD, y director académico y co-editor del Global Talent Competitiveness Index, se refirió al notable crecimiento de la automatización y el riesgo de continuar manteniendo una sistema educativo pensado para otro contexto mundial: "El trabajo de rutina está siendo asumido por algoritmos y máquinas, pero esto crea nuevas oportunidades de trabajo conectado e innovador. Sin embargo, nuestro sistema escolar, que data de la era fabril, prepara a nuestros niños para el trabajo rutinario más que para la creatividad y los proyectos, y también descuida fomentar la mentalidad de aprender-cómo-aprender que se necesita en un mundo donde la gente tendrá múltiples carreras durante sus vidas".

 

Siguiendo esta línea de análisis, el director general del Grupo Adecco, Alain Dehaze, manifestó: "El rápido avance de la automatización y la inteligencia artificial es la fuente de los cambios más perturbadores de nuestro tiempo en la manera en que vivimos y trabajamos. La transición será difícil, por lo que los gobiernos y las empresas deben actuar. Las reformas del sistema educativo son urgentemente necesarias para proporcionar las habilidades técnicas y personales adecuadas, y la capacidad de adaptarse al cambio. A medida que la realidad de múltiples carreras se convierte en la norma, los trabajadores deben impulsar la empleabilidad, comprometiéndose con el aprendizaje permanente. Al mismo tiempo, las políticas de empleo deben combinar la necesidad de flexibilidad de los empleadores con la protección social. Sólo trabajando juntos podremos responder a los retos, liberar el poder del trabajo y fomentar la prosperidad".

 

Abordando la problemática laboral que se desprende de profundización de los procesos de automatización, el director general del Human Capital Leadership Institute, Su-Yen Wong, reflexionó: "La tecnología tiene un profundo impacto en la naturaleza y la estructura del trabajo. En esta era digital en la que el trabajo está en constante evolución, se premia no a los empleados que poseen el más alto nivel de competencias técnicas, sino a aquellos que tienen la capacidad de aprender y re-aprender en el trabajo. Muchos empleados se enfrentarán al desempleo tecnológico y estructural si no se reinventan a sí mismos. Para aprovechar el poder del capital humano, tanto los gobiernos como las empresas deben inculcar una cultura de aprendizaje continuo en la fuerza de trabajo y también ayudar a las personas que no poseen las habilidades adecuadas para que en el futuro puedan adaptarse".

 

Fuente: 2017 Global Talent Competitiveness Index Focuses on Talent and Technology

 

 

Marzo 2017